Y así fue como, de la noche al día, la persona a la que le había confiado todos mis sueños , todos mis miedos, todas mis ilusiones, todas mis debilidades, todas mis inseguridades y hasta mi propia vida me dijo que ésto era el
final. Que lo sentía. Y que
adiós
Tu sinceridad es encantadoramente dura, pero bonita.
ResponderEliminarUn adiós nunca es para siempre :)
ResponderEliminar